Especial Semana Santa, 8 destinos para tapear con pasión

Helado de AOVE, piña, manzana y jengibre, restaurante Los Sentidos
photo_camera Helado de AOVE, piña, manzana y jengibre, restaurante Los Sentidos (Linares)

Decir Andalucía es decir tapeo. Y con la Semana Santa a la vuelta de la esquina, nada mejor que mirar hacia el sur para planificar unas vacaciones en las que se mezclen el solemne disfrute de las celebraciones religiosas y de una deliciosa gastronomía en pequeñas porciones que abarrotará una vez más las barras de tabernas, bares y restaurantes. Tapeo con olor a cera en el asfalto, saetas nocturnas y marchas militares. Semana Santa de sabores tradicionales y modernas elaboraciones. Te proponemos 8 destinos para tapear con pasión en Andalucía.

1. Almería: Nuestra Tierra (Jovellanos, 16). Los hermanos Diego y Moisés Ferrón regentan esta taberna situada en pleno centro de la capital mediterránea. Ambiente tradicional andaluz para un establecimiento especializado en productos de la provincia almeriense. De la costa al interior. La carta varía semanalmente y ofrece algunos clásicos como migas con boquerón frito y pimiento, vinagreta de pulpo, cherica de palometa con ajoblanco, zaramandoña de los Filabres, lomo con patatas al ajo cabañil, crujiente de morcilla de Serón con confitura de tomate o queso de cabra de Abrucema a la plancha, entre otras. www.tabernanuestratierra.comMinihamburguesa de presa ibérica, restaurante La Esquina de Sopranis

2. Cádiz: La Esquina de Sopranis (Sopranis, 5). El barrio de Santa María es parte del alma del Cádiz más popular: apretadas callejas, casas-palacio, puestos de pescaíto frito y un ambiente relajado a un paso de la plaza de San Juan de Dios y del puerto de la ciudad. Aquí encontrarás una de las propuestas más sabrosas de esta milenaria urbe, La Esquina de Sopranis, un bar de tapas que ha crecido a la sombra de su hermano mayor, el restaurante Sopranis, abierto en 2007 por Adela, Ramón y Agustín. Cocina tradicional actualizada y en pequeñas porciones en un ambiente minimalista y muy agradable donde encontrarás, entre otras, una deliciosa pavía de merluza de pincho, camarones de las salinas fritos en AOVE, morrillo de atún confitado o carrillera de ternera. www.sopranis.es

3. Córdoba: Taberna Sociedad de Plateros de Mª Auxiliadora (Mª Auxiliadora, 25). El tapeo cordobés es un tapeo sin sorpresas, de animada conversación y terraza; de buena materia prima y sabores tradicionales. Por eso nuestra propuesta en esta bella ciudad andalusí se detiene en la calle Mª Auxiliadora, donde los plateros de la ciudad crearon su sociedad en 1868. A este restaurante se le conoce popularmente como la Casa del Bacalao, por su especialidad. Así que si no quieres salirte de la norma y ejercer de cordobés por un día pide su bacalao a la antigua, las croquetas de bacalao o el revuelto de bacalao dorado (2 €). www.sociedadplateros.com

4. Granada: La Borraja (Plaza Fortuny, 1). Esta ciudad se ha convertido, muy a pesar de los hosteleros, en la capital del tapeo nacional por antonomasia. Urbe universitaria, en muchas de sus barras se ha impuesto aquello de la cantidad sobre la calidad. No todo es, por tanto, tapeo saludable ni es tampoco la tapa una obligación del hostelero. El Barrio del Realejo, a los pies de La Alhambra, es uno de los focos del turisteo granadino. Y aquí se sitúa este restaurante que dirige desde 2011 el joven chef Miguel Dorado. Cocina fusión, de mercado, suculenta y bien trabajada: daditos de queso curado en aceite de oliva y romero con lomo de orza asado al carbón, mejillones naturales escabechados en casa con mahonesa o anchoa 0/0 en tosta crujiente y tomate raf rallado, para abrir boca. www.laborraja.com

Albóndigas de choco, restaurante La Borraja

5. Huelva: Ciquitrake (Rascón, 21). Ya van para ocho los años en que el chef Carlos Ramírez le dio una vuelta de tuerca al negocio familiar para abrir el gastrobar que puso patas arriba el tapeo en la capital onubense. Cocina tradicional, excelente materia prima y mucha imaginación: desde los flamenquines de espárrago verde a la ensaladilla de gambas, milhojas de carrilleras, el “viaje” de huevos, patatas y foie, albóndigas de choco, callos de ternera, croquetas de puchero o alcachofas a la plancha. Tomo muy a lo guervano. www.ciquitrake.com

6. Málaga: Souvi (Afligidos, 3). Caminando un poco fuera del meollo más turístico del centro malagueño, por el eje que forman Santa María y Cister, a los pies de la torre catedralicia, se llega al entorno del Museo Revello de Toro. Aquí se sitúa un pequeño local digno de mención: Souvi. Álvaro Souvirón comanda sus fogones: pide la tapa de endibias con taboulén de mar y yogur de cilantro, rollitos de pringaera con hummus y caldito puchero, fideuá con langostinos y conejo con espuma de ajos asados o las croquetas de carrillera de ternera. www.souvitaperia.com

7. Linares (Jaén): Los Sentidos (Doctores, 13). La capital de la comarca jiennense de Sierra Morena es una de esas pequeñas ciudades donde el tapeo cobra categoría en bares y tabernas. Tapeo del tradicional, el que en un platillo de cristal acompaña a la consumición y que ofrece, al cliente, la posibilidad de elegir en una rumbosa carta de tapas gratuitas. En mitad de esa fiesta de sabores tradicionales ejercen algunos restaurantes dignos de ocupar espacio en algunos de los altares culinarios. Es el caso de éste que dirige Juan Pablo Gámez en la calle de Doctores. Un local luminoso y acogedor desde el que Gámez –chef que acapara premios como el Cuchara de Palo y el IX Premio de Cocina con Aceite de Oliva Virgen Extra en 2011- apuesta por una cocina de mercado actualizada sobre la que reina el oro líquido de esta tierra: el aceite de oliva virgen extra. www.lossentidos.net

8. Sevilla: La Escondida (Cardenal Bueno Monreal, 30). Para acabar te proponemos tapear en una zona solo para sevillanos, el Barrio de El Porvenir: situado más allá de los Jardines de la Buhaira y a espaldas del Parque de Maria Luisa, una zona tranquila y residencial a la que podrás llegar, además, pedaleando en una de las bicicletas que se alquilan en la ciudad. El carril-bici sevillano ha representado una auténtica revolución en la manera de moverse por la capital. Pablo González, ex Top Chef, comanda una cocina repleta de agradables sorpresas: milhojas de berenjena en tempura con langostinos escabechados y ali-oli de miel, delicias de Navarra rebozadas con salsa de almendra, pincho de pollo macerado  en tandoori y langostino con crujiente de papas. www.laescondidapinchoscopas.com

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